Por: Trinidad Fernández Valdés
Me dejó pensando un comentario que me hizo una persona que estaba en un taller de Integración, me dijo:” ahora hay talleres de todo tipo que antes no existían”…buena observación, a raíz de este comentario pude darme cuenta de cómo el hombre en la historia ha ido evolucionando, antes en la época de la Revolución Industrial donde el hombre era solo un número llegaba a su trabajo, marcaba su tarjeta, salía después de estar horas haciendo mecánicamente lo mismo (onda Chaplin en Tiempos modernos) para regresar al día siguiente y nuevamente marcar su tarjeta y luego salir para regresar al otro día y más y más de lo mismo, es verdad que existe una rutina, con la diferencia que hubo un despertar de consciencia en cuanto a “validar” y tomar en cuenta a la persona como ser humano y no como una máquina, de hecho se creó un área nueva llamada “Recursos Humanos”, ahora “Gestión de personas”.
Hacia donde apuntan estos talleres, más que nada a la Integración de las personas, se ha ido entendiendo en el tiempo que el ser humano como tal necesitamos ser escuchados, reconocidos en nuestro trabajo, tener empatía con quienes trabajamos, conocernos, crear un clima laboral que nos haga sentir incluidos, confiar y vivenciar la experiencia que todos somos un gran equipo, que cada uno es importante y que todos dependemos de Todos.