Por: María José Fernández
El Modelo de las 5 C del trabajo en equipo es una teoría que aplicamos constantemente en Sureste, por su simplicidad, de fácil incorporación y aprendizaje, pero además por la profundidad que esta tiene. Esta teoría creada por Tom Peters, nace a través de una investigación en donde se estudia que cosas tienen en común los equipos de alto rendimiento, lo que finalmente decanta en cinco conceptos que deben estar presentes al interior de un equipo para que este funcione de manera armónica. Estos cinco conceptos comienzan coincidentemente con la letra C y por tanto se les conoce como las 5C del Trabajo en Equipo, estos son: Coordinación, Comunicación, Confianza, Colaboración y Compromiso.
La Coordinación es una palabra muy utilizada dentro de los equipos, pero muchas veces poco aplicada, ya que no se toma en cuenta su verdadero significado el cual se traduce en la capacidad de designar funciones para luego respetar las funciones que se han designado. Para esto es fundamental conocer cuáles son los objetivos comunes e individuales y tener claridad en el rol que se desempeña, así como el del resto de los participantes. La Comunicación es el concepto quizás más mencionado a la hora de hablar sobre trabajo en equipo, ya que es evidente que sin esta no se puede sincronizar un trabajo colectivo, para que esta sea verdaderamente de calidad, es importante que exista un emisor empático, un mensaje claro y un receptor que escuche activamente. La Confianza es sin duda el pilar del resto de las 5C, ya que en base a esta se construyen las demás, debemos confiar primero en nosotros mismos, confiar en cada integrante del equipo y además confiar en el logro de nuestras metas grupales. La Colaboración dentro de un equipo está ligada a una actitud de solidaridad entre sus participantes, a actos desinteresados de apoyo entre compañeros, con la convicción de que el equipo es una sola unidad por lo tanto ayudar a otro es lo mismo que hacerlo con nosotros mismos. Finalmente el Compromiso es una actitud que podríamos describir como “tener la camiseta puesta” trabajar con pasión y sentir un fuerte vínculo de pertenencia con el equipo.
Esta mirada del trabajo en equipo nos permite desglosar las distintas características que lo componen, y si bien están entrelazadas entre sí, esta separación nos ayuda a reflexionar desde un lugar diferente y descubrir todas las posibilidades de mejora que tiene un equipo.